Μiguel Castillo Didier: Το φως της Ελλάδας στη Χιλή

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Συνέντευξη με τον Μiguel Castillo Didier, Διευθυντή του Κέντρου  Ελληνικών και Μελετών “Φώτιος Μαλλερος”, καθ.Φιλοσοφίας παν. Χιλής

Entrevista al señor Miguel Castillo Didier, director del Centro de Estudios Griegos, Bizantinos y Neohelénicos “Fotios Malleros” perteneciente a la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile.

Por Xrisí Athena Tefarikis.

Miguel Castillo Didier no requiere de mayores presentaciones en el ámbito cultural de Hispanoamérica ya que se trata de una reconocida figura intelectual y artística de gran prestigio internacional por sus numerosas publicaciones, traducciones, ensayos e investigaciones literarias y musicales.
A continuación daremos a conocer algunos de los cargos que desempeña en la actualidad y reseñaremos brevemente sus obras más relevantes para luego adentrarnos en esta entrevista que se realizó en su domicilio particular el día 18 de Abril del 2007 en Santiago de Chile.
El profesor Castillo es el Director del Centro de Estudios Griegos, Bizantinos y Neohelénicos “Fotios Malleros” perteneciente a la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile. Es el autor de las traducciones del griego moderno al español de gran parte de la dramaturgia del escritor Nikos Kazantzakis (Νίκος Καζαντζάκης)y de su obra cúlmine, “La Odisea”(The Odyssey: A Modern Sequel, en inglés), escrita en verso. Castillo escribió también dos tomos que contienen un análisis de la obra poética del escritor alejandrino, Konstantinos Kavafis (Κωνσταντίνος Καβάφης), además de la recopilación y completa traducción de toda la poesía del genial artista neohelénico.
Castillo Didier es miembro de la Academia de la Lengua de Chile y de Número de la de España y ha sido condecorado por dos gobiernos griegos. En una ocasión fue premiado por el gobierno que presidía Constantino Karamanlis y recientemente, en Febrero de este año, recibió la Orden del Fénix que le fue entregada personalmente por el actual Presidente de Grecia, Karolos Papoulias.
Castillo Didier ha sido considerado como uno de los helenistas más relevantes del mundo contemporáneo en la actualidad y algunos afirman que es incluso, el más grande de todos…
Dos pasiones : la literatura y la música
Miguel Castillo se asemeja a uno de los personajes que habitaban la provincia de Castalia en la imaginación del escritor Hermann Hesse cuando escribió su célebre novela titulada “El Juego de los Abalorios”. La Historia, Filosofía o la Literatura debían ser del dominio de los jugadores de abalorios quienes además debían realizar investigaciones acerca de la música y por cierto, interpretarla. La combinación de la cultura humanista junto con la música fue la fórmula con la que Hesse quiso expresar el camino del perfeccionamiento del espíritu humano, después que la cólera de las dos grandes guerras asolaron el continente europeo.
El profesor Castillo nos relata cómo se gestaron estas dos pasiones en su vida en forma paralela. ” Mi papá era gran lector y sentía afición por estudiar lenguas extranjeras. Era profesor de Filosofía y de Inglés. Y nosotros, los siete hermanos, desde pequeños, recordamos que para él los libros eran el tesoro más preciado y nos transmitió la importancia de la lectura. Los libros estaban por todas partes en nuestra casa y era lo único que el compraba, en ocasiones, porque como era profesor y padre de siete hijos, la situación económico era más bien estrecha. Sin embargo, los libros siempre fueron lo más respetado, lo más hermoso, lo más admirado y siempre vimos a nuestro padre leyendo, leyendo… Fue así como obtuvimos una gran estímulo para adquirir el hábito de la lectura. Yo aprendí a leer antes de entrar a la escuela. Veía a una hermana mayor que leía con avidez una revista juvenil de la época, “El Peneca”, y yo sentía una desesperación por aprender a leer. Ella se convirtió entonces en mi maestra.
Miguel Castillo Didier, detrás, una partitura de Bach”En síntesis, fue mi padre el que introdujo en nosotros, sus hijos, el amor por los libros y por la literatura en general.”
“En nuestro hogar siempre se habló de libros y de música, que era la afición de mi madre. Ella tocaba el piano y cantaba. Cuando tuvimos radio siempre escuchábamos óperas y música clásica. Por lo tanto, las conversaciones familiares giraban siempre en torno a estos dos temas: la literatura y la música.
“Y después, cuando los hermanos mayores que cursaban las humanidades comenzaron a leer -en esa época se leía muchísimo- nosotros, los hermanos menores, empezamos a escuchar nombres de poetas, escritores, de manera que el entorno que nos envolvió en forma permanente en nuestra infancia y adolescencia que simbolizaban la belleza y la entretención era exclusivamente aquello que estaba relacionado con los libros y la música.”

“Guardo recuerdos muy felices de mi infancia. Tuve una niñez de la cual conservo recuerdos muy hermosos, tanto de mi padre como de mi madre.”

¿Sus hermanos también se desarrollaron en el ámbito literario y musical?

“Mire, mi hermano mayor, jesuita, fue profesor de Latín y de Griego aunque siempre compartió la afición científica con la humanística. Lamentablemente, en la orden Jesuita ya no se imparten esas lenguas a pesar de que fue pionera en la enseñanza de las lenguas clásicas en Occidente. El fue como mi padre, muy aficionado a la lectura, y en particular, de las lecturas clásicas, y por cierto, de lecturas teológicas como correspondía a su vocación sacerdotal. De mis hermanas emergieron distintas vocaciones. Una de ellas es profesora de inglés. Una otra es enfermera. Mi hermano médico, que fue siempre un gran humanista, ha continuado hasta el día de hoy con su gran afición por la literatura. Es un ávido lector y la poesía lo apasiona en particular.”

¿Cómo se inició usted en el ámbito de las letras?

“Estudié Pedagogía en Castellano, en el Pedagógico de la Universidad de Chile. Tuve la suerte de que en esa época existiera un profesor griego de apellido Malleros que realizaba cursos libres de griego en la Universidad de Chile Yo me interesé en tomarlos y lo consulté con mi padre quién de inmediato me alentó para que me inscribiera. Así fue cómo me inicié en los estudios del Griego Clásico que tenían una duración de cuatro años. Don Fotios Malleros tenía la intención de que yo me convirtiera en un filólogo clásico-como él- por lo que los primeros años estudié griego clásico. Con el tiempo las cosas cambiaron porque el Señor Malleros, como buen griego, tuvo la intención de introducir en el ámbito universitario los estudios de la Grecia Medieval, es decir, de Bizancio. Surgió entonces un alumno que se enamoró de ese período histórico tan desconocido en nuestro país hasta entonces y se fue a especializar a Europa. Me refiero al profesor Héctor Herrera Cajas, que en paz descanse.”

“Alternativamente, ocurrió un hecho relevante relacionado con la introducción de la lengua griega moderna porque apareció en nuestro país la primera obra que se tradujo de Nikos Kazantzakis al español: “Cristo de nuevo crucificado”(“Ο Χριστός Ξανασταυρώνετα”;”Christ Recrucified”, en inglés). Fue un libro que me impactó tremendamente y también llegó a mis manos gracias a mi padre. Cuando me lo entregó para leerlo, me dijo: “Hijo, este libro no lo va a olvidar nunca” Y efectivamente, es un libro que uno lo lee una y otra vez….
Itaca

Konstantinos Kavafis

Cuando emprendas tu viaje hacia ítaca

debes rogar que el viaje sea largo,

lleno de peripecias, lleno de experiencias.

No has de temer ni a los lestrigones ni a los cíclopes,

ni la cólera del airado Poseidón.

Nunca tales monstruos hallarás en tu ruta

si tu pensamiento es elevado, si una exquisita

emoción penetra en tu alma y en tu cuerpo.

Los lestrigones y los cíclopes

y el feroz Posidón no podrán encontrarte

si tú no los llevas ya dentro, en tu alma,

si tu alma no los conjura ante ti.

Debes rogar que el viaje sea largo,

que sean muchos los días de verano;

que te vean arribar con gozo, alegremente,

a puertos que tú antes ignorabas.

Que puedas detenerte en los mercados de Fenicia,

y comprar unas bellas mercancías:

madreperlas, coral, ébano, y ámbar,

y perfumes placenteros de mil clases.

Acude a muchas ciudades del Egipto

para aprender, y aprender de quienes saben.

Conserva siempre en tu alma la idea de ítaca:

llegar allí, he aquí tu destino.

Mas no hagas con prisas tu camino;

mejor será que dure muchos años,

y que llegues, ya viejo, a la pequeña isla,

rico de cuanto habrás ganado en el camino.

No has de esperar que ítaca te enriquezca:

ítaca te ha concedido ya un hermoso viaje.

Sin ellas, jamás habrías partido;

mas no tiene otra cosa que ofrecerte.

Y si la encuentras pobre, ítaca no te ha engañado.

Y siendo ya tan viejo, con tanta experiencia,

sin duda sabrás ya qué significan las ítacas.

-Kavafis

“Ocurrió también otro hecho que hizo que me interesa en el griego moderno: la aparición de Don Jorge Razís que era griego y trabajaba en el Consulado Griego de Valparaíso. De vez en cuando venía a Santiago a trabajar en el Consulado Griego de Santiago. En una ocasión salió un aviso en la prensa que anunciaba una conferencia titulada:” Páginas de la poesía Neo-Helénica” Eso fue alrededor de 1957-58 y coincidió con la aparición de “Cristo nuevamente crucificado”. Entonces los estudiantes de griego acudimos a la conferencia del Señor Razís porque no sabíamos nada de la poesía Neo-Helénica. Así fue cómo tuvimos la oportunidad de escuchar, entre otros, tres poemas de Konstantinos Kavafis que don Jorge Razís había traducido al español: “Que el dios abandonaba a Antonio”, “Súplica” e “Itaca”. ¡Esos tres poemas me provocaron una impresión inmensa! Además, el Señor Razís leía los poemas de una manera muy hermosa, sus traducciones eran muy bellas y las leyó acompañado por una música de fondo bastante tenue. A mi me bastó escuchar esos tres poemas para darme cuenta que Kavafis era un genio. Entonces me acerqué al Señor Razís y le pregunté si había otros poemas de ese autor. El me respondió afirmativamente y me los envió, por cierto, en griego moderno. Y allí empezó mi problema porque sólo conocía el idioma clásico. Por otra parte, el libro “Cristo nuevamente Crucificado” también me había hecho sentir curiosidad por conocer el griego moderno. Le remití esta inquietud a Don Fotios Malleros, quién muy a pesar suyo porque como ya le señalé, tenía expectativas de que yo me convirtiera en un filólogo del griego clásico, me dio la dirección de una librería de Londres y yo les escribí. Me mandaron una antología de Kavafis, “Cristo nuevamente Crucificado” y un pequeño libro de Gramática de griego moderno.”

¿Le sirvió el griego clásico para aprender el griego moderno?
“El griego clásico me ayudó muchísimo. Por eso es que a nuestros alumnos les hacemos dos semestres de griego clásico en forma obligatoria.”

¿Cómo fue que usted se involucró en las traducciones al español de toda la dramaturgia de Kazantzakis y, en particular, de una obra tan compleja como “La Odisea”?
“Fue de a poco, pero con el tiempo me empecé a encantar con la comprensión de la belleza del lirismo de “La Odisea” y uno siente la necesidad de compartirla no sólo con su esposa, sus hijos o con las personas más cercanas si no con un público más amplio. También me enteré que no había traducciones de literatura neohelénica al español ya que esta lengua era muy poco conocida porque como ya le conté, lo que se estudiaba en aquel entonces, era sólo el griego clásico.”

“Como cursaba estudios de abogacía en forma paralela a los de Pedagogía en Castellano, publiqué en un diario mural de la Escuela de Leyes la traducción de tres poemas del griego moderno y los coloqué en el diario mural. En 1973, don Alvaro Bunster, que era Secretario General de la Universidad de Chile, al enterarse que el poeta griego Georgios Seferis obtuvo el Premio Nobel de Literatura me llamó y me sugirió que se investigara algo de este poeta desconocido en Chile. Fue así como se terminó publicando en los Anales de la Universidad de Chile un articulito acerca de tres poetas griegos: Giorgios Seferis (Γιώργος Σεφέρης), Kavafis y Palamás, junto con una selección de poemas escritos por estos vates de la literatura neo-helénica. Algo de Kavafis se sabía porque el Ex-Presidente colombiano Betancourt, en los años 58-59, había traducido algunos poemas de Kavafis del francés.”

Odiseo Elytis”De Odiseo Elytis traduje algunos poemas en 1969 y el mismo poeta me mandó decir que eran las primeras traducciones al español. Después de obtener el Premio Nobel, surgieron varias otras.

“Ahora, respecto de Kazantzakis, el fue un escritor que cautivó a nuestra generación. Cada novela que aparecía publicada al español de ese escritor nos tenía fascinados: “Vida y hechos de Alexis Zorba”, “Libertad o Muerte”, “El Pobre de Asís”, entre otras.”

¿Eso sigue ocurriendo con la juventud actual?
“Si, claro que sí. Hemos tenido alumnos que han hecho trabajos, – por primera vez hemos publicado trabajos de esta índole en nuestra Facultad- de seis alumnos de pre grado hechos sobre la base de “La Odisea” de Kazantzakis y sobre la poesía de Kavafis. Muy hermosos y poéticos… Ambos autores siguen cautivando a la juventud. He hecho varios cursos sobre “La Odisea” de Kazantzakis y he tenido excelentes alumnos. Muchos jóvenes están desesperados esperando que “La Odisea” se vuelva a publicar en español.”

¿A qué se debe esta sed de los jóvenes contemporáneos de leer a escritores tan espirituales y líricos como Kazantzakis y Kavafis? ¿De qué entorno provienen?

“Allá en nuestra Facultad, la mayor parte de nuestros alumnos provienen de las carreras de Literatura Hispánica, Literatura inglesa, bastantes de Filosofía, de Historia, incluso de Ciencias Sociales y algunos que están finalizando la carrera de Sociología. También hemos tenido estudiantes de Arquitectura, Ingeniería y de las Pedagogías.”

¿Han aumentado los alumnos de Estudios Clásicos?
“Han aumentado bastante: este año [2007] comenzamos con 25 alumnos y hay que tomar en cuenta que son personas que estudian otras carreras o que trabajan y toman clases nocturnas (tres horas diarias). Añádase a esto las dificultades del Transantiago y las lluvias en invierno. Son personas muy sacrificadas… Ellos son los que realizan el Diplomado.”

En algunos países europeos se está volviendo a impartir los estudios de lenguas clásicas en la educación secundaria. ¿A qué atribuye usted este hecho?

“Yo pienso que a pesar de que el mundo contemporáneo está expuesto al bombardeo terrible de la televisión y nosotros los profesores estamos tratando de enseñar y la televisión se encarga de desenseñar, – y que podría ser un medio maravilloso de educar, tanto a los niños como a los jóvenes-, pero insisto, a pesar de este bombardeo feroz de la televisión, porque es aplastante en realidad, y sin embargo, a pesar de toda esta tiniebla terrible de la televisión, este medio lanza de a momentos unos rayos que son captados por algunos jóvenes que los induce a investigar más profundamente acerca de algunos temas cultos.

“Además, la Unión Europea hace grandes esfuerzos en el ámbito cultural, cosa que aquí no tenemos, ya que existe una gama de estudiantes que se están movilizando de un país a otros, becas muy importantes que incluyen pasajes, movilización, entre otros incentivos. Así es como hoy en día vemos que hay muchachos griegos estudiando en España y viceversa, jóvenes españoles que estudian en Grecia. Para nosotros aquí en Latinoamérica, las cosas son mucho más difícultosas. La Universidad raramente podría costearle pasajes a los profesores y mucho menos a los estudiantes. Sin embargo, ahora con la introducción de Internet, los jóvenes tienen acceso a información que era muy difícil de hallar antes y se puede pesquisar en un lapso de tiempo muy breve. Incluso en la parte gráfica se pueden apreciar monumentos y otros en imágenes de bastante calidad. Al menos, para una persona que tiene inquietudes por el mundo antiguo se puede decir que cuenta con un importante vehículo para conocerlo y estudiarlo y que esto se logra gracias a Internet.”

¿Cuáles son las cátedras que ustedes imparten en el Centro de Estudios Griegos?
“Nosotros enseñamos Griego Clásico, Historia Antigua, Literatura Clásica, Filosofía Antigua y Griego moderno por separado. Y se dan cursos de Literatura Griega moderna como ramos optativos. El Centro de Estudios Clásicos tiene una Licenciatura y un Magíster porque para realizar una carrera, como un Bachiller, por ejemplo, dedicado a la Grecia Clásica, éste no le permitiría al alumno subsistir económicamente con su título en mano: cero porvenir laboral. De lo contrario, tendrían que tratarse personas que tienen resueltos sus problemas económicos y que pueden darse ese lujo o que tendrían que estudiar otra carrera además para poder subsistir.

Lo que si hay posibilidad y esperamos que así sea, en un par de años más, es ofrecer un Magíster en Estudios Clásicos ya que hay cinco profesores que se están especializando para ejercer posteriormente como docentes. Tres de ellos están estudiando en España, otro, en la Universidad Católica de Santiago de Chile -pero se trata de un Curso impartido por una Universidad Española- y el otro caso es el de una persona que está realizando sus estudios en la Universidad Católica de Valparaíso. Uno de estos jóvenes obtuvo una beca Onassis para terminar la tesis en Grecia pero está trabajando en ésta por ahora en la Universidad de Granada con un profesor griego que reside desde hace muchos años en España.”

¿Ustedes tienen proyectos para trabajar a través de Internet?
“Es difícil porque tenemos problemas horarios. Quizás cuando lleguen estos cinco alumnos podremos avanzar en este tema. Los profesores, en general, están contratados por unas pocas horas con excepción de uno que está contratado con jornada completa.”

“Tenemos un sitio en Internet donde tenemos entre otros, unos programas realizados en PowerPoint como Kazantzakis- Mistrás, otro sobre Constantinopla, sobre Kavafis-Alejandría, Alejandría Antigua y también algo se hace gracias a los títulos que aparecen de nuestras publicaciones “Neo-Byzantion” y los sumarios de los títulos se han encargado de que nos soliciten adquirir algunos libros realizados por nuestro Centro.”

¿Cuántas publicaciones se han realizado en el Centro de Estudios Griegos?

“En el 2006 hemos completado 82 publicaciones las que se iniciaron en 1970.”

¿Cuántas veces lo ha condecorado el gobierno de Grecia?
“Dos. El año 1991, obtuve la Cruz de Oro de la Orden del Honor que fue durante la Presidencia de Constantino Karamanlis y me la entregó un Ministro de Estado en Atenas. Fue la primera vez que fui a Grecia.

La segunda condecoración se llama “Orden del Fénix” y me fue otorgada durante el mes de Marzo de este año [2007]en Atenas y me la entregó personalmente el Presidente de Grecia, Karolos Papoulias. Para mí esto representó algo muy especial, porque nunca había ido al Palacio Presidencial de Grecia ni tampoco había estado con el Presidente. Además para mí tenía especial significación porque había mantenido correspondencia con el Señor Papoulias cuando residí en Venezuela. En aquel entonces, el era Vice-Ministro de Relaciones Exteriores. Después fue Ministro de Relaciones Exteriores y cuando salió elegido Presidente le enviamos unas publicaciones del Centro de Estudios Griegos además de nuestros buenos deseos. El nos respondió con unas cartas muy bonitas, no de secretaría, si no que manuscritas y recordó nuestra colaboración anterior. Y ahora ¿se le ocurriría a él condecorarme…digo yo? Las palabras que me dirigió fueron muy hermosas…También asistió al acto de entrega de esta condecoración el antiguo Embajador de Grecia en Chile, Charalambos Dimitriou. En esa ocasión fue condecorado también el Embajador en Italia, Gabriel Valdés, por la campaña que realizó en el Congreso chileno para la restitución de los mármoles del Partenón.”

¿Recibe el Centro algún aporte económico del gobierno de Grecia?
“En realidad el Centro existe gracias a tres cosas: primero, a la generosidad de los hermanos Jorge y Gabriel Mustakis que donaron la edificación del entonces denominado Pabellón Helénico antes que existiera el Centro en 1961. Se donó para que fuera Sede de los Estudios Griegos y fue nombrado Directores Señor Fotios Malleros. Esa fue una base muy importante para que Don Fotios pudiera desarrollar una labor y afirmarse en lo que estaba emprendiendo. Usted sabe que nunca faltan las personas que dicen que los estudios antiguos no sirven para nada, etc. En segundo lugar, por la iniciativa del Profesor Malleros de impartir clases y publicar libros que divulgaron el Bizantinismo que era un tema absolutamente desconocido en Chile. Y finalmente, el aporte que realiza el Gobierno de Grecia, para la publicación de los libros que se realizan en el Centro. Gracias a esto se ha dado conocer gran parte de la literatura neo-helénica en nuestro país y en muchos otros de habla hispana.”
La carrera musical de Castillo Didier
“Siempre quise estudiar música, sólo música, pero no teníamos piano en la casa, los profesores particulares de piano eran caros, así que no se pudo… Entonces logré estudiar piano en el Conservatorio -paralelamente estudiaba Pedagogía en Castellano, Griego, y Derecho-y los ramos complementarios que se hacían y después en 1970 logré entrar a un Curso de Interpretación de órgano porque aunque encontraba precioso el piano, mi objetivo era aprender el órgano y había una cátedra de este instrumento que duraba seis años y allí estuve hasta 1973 cuando me expulsaron de la Universidad de Chile. Todavía no sé porqué…Pero yo seguí siempre tocando cuando me vi obligado a salir del país y me fui a vivir a Venezuela. Allí hice muchos trabajos de musicología, en parte, para ganarme la vida. Fue entonces cuando publiqué unos catálogos de los órganos de Venezuela que han sido nombrados Monumentos Nacionales después que se editaron estas publicaciones.”

“Me siento muy agradecido de la generosidad del pueblo venezolano sin la cual no habría podido tener acceso a los archivos y a los instrumentos de órgano que allí existían. También hice biografías de músicos antiguos y contemporáneos de Venezuela. Los días sábados me iba al archivo de la Catedral de Caracas para investigar y trabajar sin ninguna restricción. Lo mismo me ocurrió con el archivo del Arzobispado de Mérida. “A ver chico, móntate en el coro, tranquilo, aquí están las llaves” me decían los encargados de la Iglesias. Los venezolanos son increíblemente cordiales, espontáneos. En ese país viví trece años.”

¿Usted tocaba el órgano en ese país para procurarse medios económicos?
“Si. Tocaba como organista suplente de la Iglesia Luterana, en la comunidad de habla castellana, en otras Iglesias Católicas y fui profesor de Música en el Estado de Miranda donde di clases de Historia de la Música, sin ser ésta mi especialidad.”
¿Cuándo practica el órgano en la actualidad?

“Todos los días. En las mañanas toco alrededor de una hora o más. A veces también lo hago en la noche. Para eso adapté este cuarto de música donde hay varios instrumentos (hay incluso un teclado electrónico que usan sus hijos) y que es para el uso de toda la familia. Mi señora toca el piano. Además, tenemos la certeza de que no molestamos a los vecinos y hasta aquí no llegan ruidos desde el exterior de ningún tipo: teléfonos, televisión, entre otros. Por eso escogí este sitio para que realizáramos esta entrevista.”

¿Cuál es la versión real de un órgano que usted adquirió por traducir la obra “La Odisea” de Kazantzakis?

“La señora Helena Kazantzakis, escritora griega y esposa de Nikos Kazantzakis, anhelaba fervientemente que la obra “La Odisea” escrita por su marido, fuese traducida al español debido al gran número de hispanoparlantes que existían en el mundo. Entonces me pidió que yo hiciera la traducción, me dijo que ella se comprometía a ayudarme respecto de ciertos vocablos (la difícil obra de Kazantzakis contenía numerosos giros cretenses, palabras extraídas de dialectos y vocablos creados por el escritor griego) por lo que estuvimos en contacto durante seis años para realizar esta verdadera hazaña. Ese fue el tiempo que me tomó traducir “La Odisea”. A cambio de mis honorarios, le pedí a la Sra. Kazantzakis la adquisición de un órgano hecho a mano que se fabricó en el norte de Alsacia, Francia, cuya elaboración tardó los mismo seis años que duró la traducción… La señora Kazantzakis lo fue cancelando anualmente.”

“En ocasiones pensé que la obra no la iba a poder terminar porque no existían diccionarios idóneos para este trabajo, ni menos hace más de treinta años atrás Sin embargo, la Sra. Kazantzakis no dejaba de alentarme y gracias a su apoyo constante finalicé la traducción. En la actualidad la versión en español de esta obra está agotada. En Grecia quieren editar una versión bilingüe: en griego y en español. ¡Imagínese lo que va ser eso! Son 33.000 versos en un solo idioma. Yo estoy presto para volver a editarla y ya la tengo totalmente corregida pero hay que esperar que acaben unos trámites este año- que se cumplen cincuenta años del fallecimiento de Kazantzakis- para lograrlo.”
Castillo Didier y Kavafis

Miguel Castillo Didier ejecuta en su órgano construido por él mismoDurante los últimos años, Castillo Didier ha tenido un gran reconocimiento internacional gracias a la publicación de un par de volúmenes que contienen un análisis de la vida y obra del poeta greco-alejandrino, Constantino Kavafis. En esta obra las creaciones de Kavafis aparecen en griego y en español.

¿Por qué se tardó tanto en conocer la obra de Kavafis en español, en particular y en el mundo, en general?

“Lo que pasa con Kavafis es lo que pasó con su vida. Esta última transcurrió totalmente inadvertida. Como usted comprenderá resulta muy legítima la ambición de publicar lo que uno escribe. Kavafis estuvo en todo su derecho de publicar sus poemas pero a él nunca le interesó hacerlo. Escribía las llamadas “feuilles volantes” (hojas volantes), unos poemas sueltos que deambulaban de un lugar otro y por lo cual resultaba muy difícil reunirlos y ponerlos en un solo volumen. En el año 1929, cuatro años antes de que falleciera el poeta, se le ofreció editar sus poesías en inglés y el se negó. ¡Imagínese que un libro en inglés era la llave para darlo a conocer en el mundo… ! Solamente publicaba esas hojitas sueltas, y se las enviaba a distintas personas que el escogía, por aquí y por allá… Eso fue lo que hizo que se diera a conocer en forma tan posterior a su muerte, ya que en el intertanto estalló la Primera Guerra Mundial. En 1948 recién se publicaron por primera vez los llamados “Poemas Canónicos” en Grecia. Así fue cómo el mundo conoció que había existido ese inmenso genio que fue traducido posteriormente a varios idiomas.

Se podría señalar que el primer traductor de poemas de Kavafis del griego al español fue don Jorge Razís, pero no las publicó y luego vino la traducción del colombiano Betancourt, alrededor de 1958.”

Algunas personas señalan que usted es más conocido en Grecia que en Chile porque algunas de sus traducciones se encuentran en las casas- museos de Kazantzakis en Creta y de Kavafis, en Alejandría, Egipto.¿Es efectiva esta afirmación?

“No lo sé (risas)… Ja-Ja. No lo sé…”
Algunas obras de Miguel Castillo Didier

Literatura, helenismo y neohelenismo:

* Antología de la literatura neohelénica Del s. X a Kavafis, Santiago 1972, 2ª. Caracas 1986.
* El tiempo, la muerte y la palabra en la Odisea de Kazantzakis, Santiago 1975.
* Teatro (Odiseo, Julián, Nicéforo, Kapodistrias) de Nikos Kazantzakis. Introducción, traducción y notas, 1978.
* La Odisea de Kazantzakis, estudio y traducción, Barcelona 1975;
* Poetas griegos del siglo XX, Caracas 1981, 2ª. Caracas 1991;
* Antología fundamental de Elytis y ensayo introductorio a una poética de la luz, Barcelona 1981;
* El Axion Estí de Odiseas Elytis, estudio y traducción, Caracas 1981.
* Miranda y Grecia, Caracas 1986.
* Las odas griegas de Andreas Kalvos, Santiago 1988.
* Miranda y la senda de Andrés Bello, Caracas 1990, 2ª. Caracas 1996.
* Kavafis íntegro, Ensayo y traducción de su poesía, Santiago 1991; 2ª ed. 2003;
* Poesía heroica griega Epopeya de Diyenís Akritas Cantares de Armuris y del Hijo de Andrónico. Estudio, traducción, notas, bibliografía, texto bilingüe, Ed. Universitaria, Santiago, 1994.
* Grecia y Francisco de Miranda, Santiago 1995; 2ª ed. 2002.
* Cristóbal Colón, de Kazantzakis, traducción y prólogo, 1997.
* Dos Precursores: Miranda y Rigas, Santiago 1998.
* Anacreónticas, estudio y edición trilingüe y tetratextual, Santiago 1999.
* Giorgios Seferis, Antología poética, selección, traducción, y prólogo, 2000.
* Mithistórima, Stratis el marino de Yorgos Seferis, estudio y traducción, Santiago, 2001.
* Poetas del dulce país de Chipre, Santiago, 2002.
* Constantinopla la Ciudad Reina 1453-2003. Quinientos cincuenta años de la Caída de Constantinopla, Santiago, 180 pp., 32 imágenes. 2003.
* Kavafis íntegro, 2ª.ed. revisada y complementada.
* Un milenio de poesía griega, Santiago, 2004.
* La Odisea en la Odisea, Santiago, 2007.

Música:

* L´Orgue au Chile, París 1978;
* Caracas y el instrumento rey (Catálogo de los órganos de Caracas), 1979;
* “Un Cavaillé-Coll en la Emérita Augusta americana (órganos de Mérida y los Andes venezolanos)”, en Revista Musical de Venezuela, No. 7-8, 1983, 1982;
* Venezuela y el instrumento rey (Catálogo de los órganos de Venezuela), 1983;
* órganos y organistas de la Catedral de Caracas, 1983;
* Juan Bautista Plaza (1898-1965): una vida por la música y por Venezuela, 1985;
* órganos de Santiago, Santiago 1998.

www.apocatastasis.com

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